La semana pasada, informábamos sobre los incendios forestales que devoraban el Parque Nacional Los Alerces, en la provincia argentina de Chubut. Y señalábamos cómo el poder político usaba esta catástrofe para construir un enemigo interno en la figura del pueblo mapuche en lucha por la recuperación de su territorio.

Si cruzamos la cordillera, veremos que son varias las cosas que nos hermanan con nuestros vecinos trasandinos. Y decimos esto porque también el pueblo chileno, especialmente de la zona circundante a Valparaíso, está sufriendo uno de los más grandes incendios forestales de los últimos años.

El proletariado y el pueblo pobre de Chile, que hoy festeja la muerte del ex presidente Piñera, uno de los gobiernos más brutalmente represivos de Sudamérica de las últimas décadas, también es quien más está sufriendo las consecuencias del fuego sobre sus viviendas y sus vidas.

Compartimos el testimonio de José Miguel Bonilla, que vive en Valparaíso; y a continuación, un resumen de lo que nos contara sobre la situación.