Sobre el tratamiento de los medios de comunicación locales a la represión de manifestantes en el Parque Aguiar.

Es reconocido el papel de los medios masivos de comunicación en la construcción de mensajes sociales que, a su vez, pasan a formar parte de un “sentido común” general, que normalmente, está cargado de impresiones, valores, definiciones y prejuicios que reafirman ideas de las clases dominantes. Entonces, las mentiras, la distorsión sobre determinados hechos y declaraciones, las calumnias hacia colectivos, organizaciones y luchas de los oprimidos, y su tratamiento sesgado aparecen permanentemente en los grandes empresas multimedios nacionales con el objetivo de defender intereses determinados que entran en juego según la problemática. Para dar un ejemplo nacional, vemos o mejor dicho no vemos aparecer en las pantallas sobre la enorme lucha protagonizada por los explotados en la provincia de Chubut contra la megaminería impulsada por el gobierno de Alberto Fernández y por el gobernador Arcioni, ambos del partido peronista.

Estamos acostumbrados en ver como en los diarios  y canales de TV de Capital Federal y de las ciudades más importantes del país plantean posturas de acuerdo a líneas políticas opositoras u oficialistas  atacándose mutuamente, pero todos ellos toman el mismo camino cuando vierten operaciones contra las luchas de trabajadores, jóvenes o activistas aglutinados detrás de alguna causa “popular” que pone en cuestión la propiedad privada y negocios comunes del conjunto de la burguesía. Es tan común escuchar la demonización de sectores u organizaciones obreras que estas incluso recalan en la opinión de los propios afectados generando una división que mina la unidad al interior de la clase.

En San Nicolás, los medios más importantes también responden a esa lógica comunicativa al servicio del poder económico, político o sindical para difundir u ocultar información conveniente para las clases sociales dominantes y de las instituciones que actúan en beneficio de ellas. En la misma línea, estos medios reproducen masivamente mensajes que distorsionan la realidad de los hechos a través de sus diversas plataformas (papel, radio, internet, TV). Tal actividad  servil apelando a la mentira y la distorsión, está saliendo con todo su esplendor en el tratamiento de los acontecimientos sucedidos el martes 26 de enero pasado en el parque Aguiar cuando la policía local y provincial reprimió brutalmente a ciudadanos defensores del parque que protestaban pacíficamente contra las actividades destructivas y contaminantes del medioambiente propiciadas por el municipio local encabezado por el intendente Manuel Passaglia.

El caso del Diario El Norte es el más destacado. En su portal de internet tituló el mismo día 26 de enero “Graves enfrentamientos en el parque Aguiar”; tres día después, en el mismo sitio publicó en una nota del 29 de enero, “Son de público conocimiento los hechos ocurridos el martes 26 del corriente, donde un grupo de ciudadanos tuvo un brutal enfrentamiento con la policía”. Entre las personas que participaron del acontecimiento, había integrantes de “CONA” (Comunidad Nicoleña por el Ambiente) y vecinos que quisieron apoyar la causa de la comunidad. El conflicto se enmarca en la imposibilidad para la Municipalidad de continuar con la obra de reconstrucción del camino del Parque Aguiar, ya que este grupo de personas estaba impidiendo su realización. El martes, la policía se hizo presente en el lugar solicitando que se retiren para que las maquinas pudiesen trabajar. Al no obedecer los pedidos policiales, se desenvolvió una verdadera “batalla campal”, donde las agresiones terminaron con personas heridas y detenidas.

Estas líneas ofrecen un documento suculento para analizar y mostrar cómo los medios pueden deformar una realidad en función de intereses bien puntuales y mezquinos y con una bajeza sideral. En primer lugar, el diario habla de enfrentamientos cuando lo que existió fue una evidente represión con violencia desmedida mostrada por los videos compartido en redes por los propios manifestantes. Luego, coloca al municipio de actor inocente que no pudo continuar con los trabajos de reconstrucción del camino, sin nombrar el delito de arrojar materiales contaminantes en el parque. También, retira toda acción violenta de la policía mostrándola como amigable para hacer cumplir la orden del juez, y finalmente, el colmo de presentar los hechos de “batalla campal”. Una vergüenza para el periodismo serio, incluso para los que se identifican con el poder.

El sitio web El Informante no se queda atrás en la operación, transitando la misma senda y escribiendo  “En el marco de las protestas que se llevan adelante en el predio, este martes se originaron incidentes entre la policía y ambientalistas”; nuevamente se deja sin mencionar que hubo represión policial, que la violencia fue originada por la policía. Luego, prosigue diciendo, “Personal policial intervino en el conflicto, hubo forcejeos y once personas fueron aprendidas y trasladadas a la Comisaría Tercera por Resistencia a la autoridad, Daño e Infracción al Artículo 42 de la Ley 8031. Entre los detenidos se encuentra el Dr. Rubén Andino, Presidente de PJ San Nicolás… De acuerdo al informe policial dos de los ambientalistas debieron ser derivados al hospital San Felipe por lesiones. Entre ellos, una mujer que se lesionó cuando la ingresaban al patrullero rompiendo el vidrio de la puerta trasera. En este fragmento vemos como se reduce el hecho violento de la represión a forcejeo, lo que implica la inexistencia de un acto abusivo de la fuerza represiva hacia los manifestantes, y además, se emplea una vil mentira para justificar los cargos contra ellos: la ruptura de los vidrios de un patrullero, incidente que no ocurrió, lo que denuncia la propia víctima en sus redes sociales. Es casi un talento este uso espurio de la pluma para adular a la minoría de siempre.

Otro aspecto grave a mencionar es que no se menciona el apresamiento ilegal de una de las personas que acudió para informarse a las puertas de la comisaría tercera. Esta persona testifica que literalmente fue “chupado” por estar sacando fotos. Aquí se hace la vista gorda sobre procedimientos represivos que rememorar los procedimientos oscuros perpetrados por el terrorismo de Estado. Cuestión que no podemos dejar pasar.

Vale agregar sobre el tratamiento mediático, que algunos medios afines a políticas oficialistas a nivel nacional hacen foco en la responsabilidad casi exclusiva del intendente sin nombrar a las autoridades provinciales (Kicilof es gobernador peronista), que en boca de Berni avalaron el accionar represivo, mucho menos se hace mención al gobierno nacional, que sustenta su modelo económico en el extractivismo destructivo del mediomabiente, tema estrechamente vinculada a la problemática que atraviesa el parque Aguiar y los humedales de la región.

El tema del tratamiento mediático sobre problemáticas sociales es un factor importante  (no el más) para que se decidan en favor de una u otra clase social, sector u organismo.  En los recientes hechos locales vemos, una vez más, que los medios masivos son funcionales al poder de turno y los poderes de siempre.

Borrador Definitivo. Revista Disonancia