Es conocida la trayectoria del flamante Jefe de Gabinete contra los derechos de las mujeres, niñas y minorías sexuales. Pero, ¿es solo eso lo preocupante? Lorena Córdoba, miembro de la Red de Profesionales por el Derecho a Decidir de Tucumán, no cree que sea así. Políticas represivas, persecución a las y los trabajadores, ajuste fiscal… la receta del hombre del Opus Dei en su propia provincia.


Entrevista: Elizabeth Moretti para Borrador Definitivo

A un mes de la derrota del oficialismo en las PASO, y ya con la campaña electoral para las elecciones definitivas en marcha, se siguen sintiendo los crujidos del reacomodamiento de las fuerzas al interior del frente gobernante.

Una de estas jugadas, y que dio y da mucho que hablar, fue el cambio de una buena parte de los nombres fuertes del gabinete. Por supuesto que la figura de Gusmán se queda, es el tipo de confianza en las negociaciones con el FMI y quien pretende garantizar la política de ajuste. Pero muchos otros nombres se modificaron, entre ellos el del Jefe de Gabinete.

Juan Manzur, nuevo personaje fuerte en este puesto, es sobradamente conocido, especialmente por ser un representante político de la iglesia católica, y por su consecuente militancia contra el derecho de las mujeres y personas gestantes a decidir sobre sus propios cuerpos. Esta trayectoria le valió algún rechazo, incluso entre quienes apoyan a este gobierno, pero que con el pasar de los días fue quedando en el olvido.

Como nos gusta, como medio periodístico, tener información de primera mano, siempre que se pueda; hablamos con Lorena Córdoba, tucumana, trabajadora de la salud y miembro de la Red de Profesionales por el Derecho a Decidir de Tucumán. Para conocer su impresión, y la del movimiento feminista tucumano en general, sobre este tan odiado personaje. La muy rica charla, además de reafirmar lo que ya sabíamos, también aporta nuevos datos sobre este proceso, que hay quienes llaman la “derechización” del gobierno; y que nosotros preferimos entender como una explicitación de políticas que siempre estuvieron allí, solo que esta vez, sin maquillaje.

¿Quién es Manzur?

Borrador Definitivo: ¿Qué significa para vos, como miembro del movimiento de mujeres, y para el movimiento feminista tucumano en general, la designación de Manzur al frente del gabinete?

Lorena Córdoba: En principio la designación de Manzur es preocupante pero por muchas razones. Desde los feminismos, tanto locales como nacionales, se puntualizó mucho sobre su oposición al aborto y sobre todo las situaciones de escándalos institucionales, los casos de Lucia y Belén, muy reconocidas. Manzur es eso, pero también es mucho más…

Justamente en Tucumán, a partir de la creación de la Red de Profesionales por el Derecho a Decidir, a partir de 2018 en la provincia, se fueron garantizando los abortos legales. El caso de Lucia fue una particularidad que abarcaba situaciones de disputa política, pero en lo que vamos del 2021 se van garantizando más de 2000 interrupciones voluntarias del embarazo. Lo cual es un montón, partiendo de que el año pasado fueron solo 700 y que en el año 2018 solo 89. O sea que va evolucionando y nosotros como profesionales en los equipos de salud  vamos pudiendo dar una respuesta, y con el respaldo de la ley, mucho más.


Porque Manzur es anti derechos pero tampoco es estúpido y en ese sentido, más allá de su voluntad política, no iba a poner en juego este ascenso por no aplicar o por incumplir una ley. Manzur en 2015, como Ministro de Salud, había firmado los protocolos de acceso a la interrupción legal del embarazo, y después en Tucumán, pasaron los escándalos que ya sabemos.  Entonces, en ese sentido, había dentro del movimiento feminista toda una discusión de que Manzur no es el único anti derechos que hay en Argentina, ni en el gabinete. Y que en la provincia de Bs. As., en Capital Federal o en otras regiones, suceden situaciones anti derechos muy fuertes, igual que acá en Tucumán. No es patrimonio del norte.

B.D.: Manzur puede no entorpecer la realización de la IVE pero tampoco debe estar en su espíritu garantizarla. ¿Cómo es el día a día de los trabajadores y trabajadoras de a salud al respecto?

L.C.: Nos parece importante destacar que esto no tiene que ver con buena voluntad política, sino por el esfuerzo que hacemos quienes trabajamos y nos organizamos para garantizar las IVE. En lo concreto: les trabajadores de salud en las dos últimas gestiones del gobierno de Manzur como gobernador, venimos teniendo uno de los peores salarios del país. Además de que se ha agudizado la persecución a la organización gremial, de otros gobiernos pero que ahora se profundizó, con sumarios administrativos, descuentos… Nos descontaron, en el último paro, más del 50% del salario, por participar en huelgas totalmente legítimas y convocadas por las condiciones sanitarias. En Tucumán tenemos la tasa más alta de trabajadores fallecidos durante la pandemia de Covid-19. Se superaron los 120 muertos y los 4.500 infectados, o sea, más del 25% del total del personal de salud. Y por denunciar ese número, un compañero de la Red fue dejado cesante, no le renovaron el cargo. Y había sido uno de los que había estado, por un lado, en las terapias intensivas, de cara a los pacientes; y por otro lado organizando las ILE. Y sin embargo, por el poner en cuestionamiento el número de los muertos por Covid, no lo pasaron a planta como hicieron con otros compañeros.

Es decir que el problema de Manzur, en lo concreto, es que aplica recetas de disciplinamiento, de avasallamiento de derechos en general, avasalla las organizaciones sindicales. Obviamente que él no pone la cara sino que pone a su ministro de salud. Pero salir a denunciar penalmente por convocar a un paro en el marco de la pandemia, habla de que hay una búsqueda de cercenar derechos ya conquistados, o avasallar, o ir por más. En tiempos de ajuste esto suele ser muy peligroso, y sobre todo para las mujeres, lesbianas, trans, travestis y sobre todo para les pobres.

¿División de poderes?

Lorena nombra, en su relato, dos casos icónicos a nivel nacional. El caso de Belén, quien, después de sufrir un aborto espontáneo, fuera judicializada y condenada a 8 años de prisión por homicidio agravado por el vínculo, y posteriormente liberada en 2017. Y el caso de Lucía, la niña de 11 años, embarazada producto de una violación, a quien se le negó el legítimo acceso a una interrupción legal del embarazo. Este caso terminó con una cesárea programada, realizada por la médica Cecilia Ousset, quien también fuera judicializada por acceder a liberar a la niña del producto de su violación. Ambos casos tienen algo en común: la actuación del poder judicial. Dice Lorena:

L.C: Si, aquí hay todo un tema. Porque quien procesa a la médica no es el ejecutivo sino el judicial; entonces ahí la discusión está en que se supone que vivimos en una democracia, donde hay independencia de poderes. Pero lo que se pone en discusión ahí, en todo caso, son los poderes de dominación, quiénes “cortan el queso”. Y ahí sí, la cuestión de anti derechos está en el ejecutivo, en el legislativo y en el judicial…

Esto se da en un marco donde la justicia patriarcal sigue cercenándonos derechos.  Yo podría enumerar tres casos que están sucediendo en este preciso momento, que son la evidencia concreta de que el avance de los derechos, de garantizar que no nos maten, no nos violen, y que si eso sucede haya una causa justa y una condena, no está garantizado, a pesar de tener leyes. Está la ley de violencia, la ley de identidad de género, y siguen ocurriendo estas cosas… Por lo tanto la resistencia tiene que ser mucho más fuerte para poder estar en mejores condiciones.

La justicia patriarcal en acción:

L.C.: Hoy se cumplen 11 meses del asesinato de Paola Tacacho, una profesora de inglés, que había denunciado 14 veces el acoso de uno de sus estudiantes. Él terminó finalmente asesinándola, en pleno Barrio Norte, a la luz de todo el mundo, en la puerta de su casa. Pensemos esto: Paola había hecho todo lo que el sistema heteropatriarcal nos exige a las mujeres, lesbianas, trans, travestis que sufrimos alguna de las formas de violencia machista. Nos impone y nos exige que denunciemos, que estemos, que lo hagamos a tiempo y en condiciones, que lo hagamos público, que lo hagamos por la vía legal, etc. Todo eso Paola lo había hecho. Si embrago, había denunciado 14 veces a su agresor y la mató en la puerta de su casa. El femicida se suicidó acto seguido, habiendo cumplido su objetivo. La única forma de justicia que podía reparar tanto dolor era el juicio político al juez que había desestimado las denuncias, que es el juez Pisa, sin embargo el gobernador Manzur demoró el proceso de juicio político, condición necesaria para un posterior procesamiento, dejando que el juez renuncie, y que se acoja al beneficio de su jubilación, obviamente para que la jubilación sea de privilegio. Después la corte desestimó la jubilación y actualmente se está iniciando el proceso de juicio político. Pero que quede en claro que este juez desestimó las 14 denuncias porque no tenía ninguna visión de genero.

Macarena Maylen Salinas, Yanet Yaqueline Santillán, Micaela Rocío Mendoza y María José Saravia, murieron a fines de setiembre mientras estaban detenidas en la brigada policial, en una comisaría que no estaba en condiciones para alojar personas privadas de su libertad. Dos de ellas tenían condena. Una de ellas tenía 22 años, pero no podía ser trasladada al penal porque no había condiciones carcelarias, menos para las mujeres, y tenía una condena de 5 años por robar un celular. Terminaron muertas en un incendio del que ni siquiera la policía atinó a llamar a los bomberos, sino que los llamaron los vecinos.

Mientras tanto, este lunes el femicida Roberto Rejas, que fue condenado el miércoles pasado, hacía cinco días, se fugó del cuartel de bomberos donde estaba alojado mientras cumplía preventiva. Con una sentencia por homicidio agravado por el vínculo, por femicidio cometido con alevosía contra Milagros Avellaneda y su hijo. Rejas era guardiacárcel. Sin embargo, se fugó y desapareció. En cinco días lo condenaron y nadie sabe. Porque estaba alojado en un cuartel de bomberos donde tenía a todos sus amigos. La justicia dijo que no había posibilidades de fuga. Hoy está buscado por interpol.

Por ese hecho, el Ministro de Seguridad, también designado por Manzur, dijo ayer a la prensa que no tenía ninguna autocrítica que hacer, porque las gestiones se miden con el tiempo y no en hechos aislados. Como si su gestión no fuese responsable de las fuerzas represivas de la provincia, que por ejemplo, asesinaron a Facundo Ferreira, un niño de 11 años, en un barrio muy estigmatizado de la capital tucumana, que escapaba de la policía y por la espalda le pegaron un montón de balazos, no recuerdo cuántos. Y es la misma policía que el año pasado detuvo y desapareció a Luis Espinosa y que tiró el cuerpo en Catamarca. Y esta misma policía es responsable el año pasado de asesinar a Walter Ceferino Nadal en la calle por violar las condiciones de aislamiento. Pero que, cuando en el mismo contexto, los padres de Abigail pedían buscar una niña de 9 años, que estaba desaparecida hacía 2 horas, que había salido a jugar y no había vuelto, no podían salir a buscarla porque los móviles estaban asignados a la cuestión de la pandemia. Y la niña fue encontrada muerta, por los vecinos que salieron a buscarla, y con signos de haber sido abusada sexualmente.


Entonces, en ese sentido, las políticas de ajuste y represión de Manzur son más peligrosas en tiempos de crisis y que por supuesto a las mujeres, lesbianas, trans, travestis, de todo el país, les resulta mucho más alarmante. Pero bueno, nos queda la organización y la resistencia en la calle, me parece, para enfrentar determinadas cuestiones frente a políticas que, en épocas de crisis económica, de crisis institucional, que la respuesta de la oposición al gobierno es más represión, más despidos, peores condiciones para las clases trabajadoras y sectores populares. Entonces no quedan muchas opciones más que la organización y la conciencia de clase, de que esto se resiste con organización y lucha, independientemente de quién sea Manzur, o si hubiese sido otro.

Proyectos de fondo

B.D.: Recuerdo que en 2018, cuando la policía asesina a Facundo Ferreira de varios balazos por la espalda como vos decías, fue el mismo Manzur el que salió a hacer declaraciones y a decir que la policía había actuado correctamente. Ahora uno ve esto y escucha la descripción que vos haces, específicamente referida a Manzur y dice: hay una perfecta coherencia entre que una persona como Manzur esté como Jefe de Gabinete, y una persona como Aníbal Fernández esté encargado de la “seguridad”, y en que por otro lado se siga sosteniendo la negociación con el FMI, que exige cada vez más precarización del trabajo, mayor ajuste, mas extractivismo, y un montón de cosas.

L. C.: Si, esta discusión también está en la calle y en las organizaciones. Porque, si bien hay quienes pensamos que esto es parte de una necesidad de dominación, para poder garantizar que sigan ganando los mismos y nos sigamos empobreciendo los de siempre, es necesario y coherente en ese sentido. También hay muchos sectores feministas que apoyan este proyecto político, y que plantean que la ultraderecha o la derecha de Macri, Vidal y demás, es una alternativa más aterradora frente a esto, entonces hay que apoyar al gobierno. Esto tiene consecuencias en la calle y pasa en todas las áreas. Sobre extractivismo tenés ese debate, hablando de feminismos tenés ese debate, sobre las organizaciones de los trabajadores, el mismo debate, sobre todos los temas tenés esa discusión: plantean que frente al fantasma de la derecha hay que comerse todos los sapos porque el enemigo, el otro, la oposición es peor. Nosotros decimos que no, yo conozco las diferencias, pero en el proyecto de fondo, que es pagarle al FMI, avanzar con el modelo extractivista y recortar derechos sobre todo en nuestros trabajos, y que eso implica reforzar las condiciones de dominación hacia las mujeres y las feminidades respecto a las cosas que no se consideran trabajo, que las hacemos gratuitamente para la reproducción de las personas, y para beneficio de otras. Bueno, mientras eso no se discuta… Y no está muy avanzada la discusión en ese sentido.

Facundo Ferreira, niño de 11 años asesinado por la espalda por la policía tucumana. Quienes dispararon acaban de recibir prisión perpetua.

Digo: está bien y me parece que es importante pensar toda la avanzada fascista que hay, sobre todo en los discursos y me parece que es importante darle un debate, una discusión, trabajar sobre ciertas cuestiones de la comunicación, pero también reforzando cuál es el proyecto político mas de largo plazo. Porque mientras no cambiemos los patrones de consumo, mientras nos quieran meter los chanchos por la ventana mientras nos morimos de hambre acá adentro, y tenemos que seguir viviendo el mundo en pandemia, no está muy clara la salida. Nos queman humedales para hacer especulación inmobiliaria mientras hay millones y millones de personas que no tienen un techo ni para vivir ni para poder alimentarse. Esa es la discusión que está de fondo: ¿cuál es el proyecto de sociedad que queremos? Lo del feminismo es importante, central y atraviesa todo, pero para eso hay que poner en claro que estamos defendiendo proyectos diferentes.

Ganamos la legalización del aborto en la calle, como hace millones de años obtuvimos la ESI; sin embargo la ESI en las escuelas no se aplica. Nosotros tuvimos que hacer 2000 abortos en lo que va del 2021 porque no se aplica la ESI en las escuelas, siguen rezando. Y por otro lado no se forma a los docentes. Tampoco hay anticonceptivos, no hay profesionales. En los lugares más alejados, sectores rurales, donde yo trabajo, no hay acceso a anticonceptivos, no hay un ginecólogo/a que vea a una mujer si no está embarazada. Querés una prevención, querés un DIU y no hay nadie que te lo ponga. No hay una intención de promover una salud sexual integral de las mujeres. Porque eso tiene un costo, eso necesita recursos, eso necesita disputa de poder económico. Entonces es todo muy lindo, pero sin el presupuesto destinado para llevarlos a cabo, los derechos son solo letra muerta.

Y sí… mientras se pague al FMI…

B.D.:- Quedará en todo caso lo que vos decías antes: la organización desde abajo, popular y la resistencia y la pelea para mantener lo conquistado y seguir conquistando más derechos cada vez.

L.C.: Exacto. Yo creo que no queda otra.