Con demora publicamos esta entrevista realizada a principios de octubre. En aquel momento, el conflicto de la Lof Quemquemtrew apenas iniciaba su desarrollo, después de la represión enviada por el estado provincial rionegrino, y con la presencia de un campamento en solidaridad sobre la ruta. Más allá de este detalle coyuntural, la nota aborda temas que no pierden actualidad como son la lucha del pueblo-nación mapuche por la recuperación de su territorio y contra el extractivismo.


Entrevista realizada por Juanjo Lázzari y Elizabeth Moretti para Borrador Definitivo RADIO

El predio donde la Lof Quemquemtrew sostiene su reclamo territorial desde hace más de dos meses se encuentra custodiado (entiéndase: sitiado) por la policía de Rio Negro. En efecto, el acampe humanitario que se mantenía en solidaridad desde el 27 de septiembre y que fue levantado el domingo 21 por la mañana, sufría de un hostigamiento constante y de la prohibición de asistir a los miembros de la comunidad, ya sea con agua o alimentos como médicamente (podés leer una crónica de los primeros días de este conflicto aquí). En ese contexto, el domingo 21 de noviembre por la tarde ingresaron al territorio dos hombres de civil que dispararon contra miembros de la comunidad asesinando al lamien Elías e hiriendo gravemente a Gonzalo, quien hoy pelea por su vida en el Hospital de Bariloche (más información sobre este hecho, aquí). Esto es un nuevo episodio de la represión a manos del estado contra esta comunidad y su reclamo territorial, al servicio de intereses de empresarios. Esta represión ya se llevó las vidas de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel y no se detendrá en su ansia de lucro extractivista.

El estado burgués es especialista en la tarea de crear un enemigo, un chivo expiatorio. De un tiempo a esta parte, la comunidad mapuche ha sido puesta en más de una ocasión en ese papel. Quizás el pico de este comportamiento se alcanzó después de la desaparición forzada a manos del estado de Santiago Maldonado, cuando desde los espacios de poder (político y mediático) se emprendió una verdadera campaña de difamación contra esta población, haciéndola aparecer como la peor amenaza histórica a la institucionalidad y la paz del territorio argentino. Obviamente esta hipótesis no llegaba a explicar por qué las fuerzas represivas del estado podían asesinar impunemente a alguien que estaba apoyando un reclamo de esta comunidad, como lo fue Santiago, y meses más tarde, a Rafael Nahuel, sin sufrir la atroz venganza.

La misma conducta se toma en la actualidad en cuanto al proceso de recuperación de tierras por parte de la Lof Quemquemtrew. Con la sola diferencia de que, quienes hoy están en el poder, haciendo declaraciones pomposas para atizar la represión, son aquellos que, en su momento, posaban de denunciar la represión de Macri y su ministra estrella: Patricia Bullrich.

Sabiendo que no es de buenos comunicadores hablar de cosas que se desconocen, más allá de que el instinto nos alcance para saber que, cuando el estado reprime, hay que estar del lado de les reprimidos, buscamos un testimonio que pueda hablarnos desde dentro del conflicto. Así es que, por intermedio de la Gremial de Abogados y Abogadas de la Argentina, llegamos a Vanesa Millañanco. Vanesa es miembro de la Pu Lof en resistencia del departamento de Cushamen, aquella comunidad conformada en las tierras recuperadas al magnate Benetton en 2015, donde la gendarmería nacional desapareció a Santiago Maldonado. La charla comienza con una reflexión sobre este hecho, cuando se cumplían cuatro años de la aparición de su cuerpo sin vida:

VM: Efectivamente ayer se cumplieron cuatro años de la desaparición, seguida de muerte del compañero Santiago Maldonado donde fue el estado y fue la gendarmería quien se lo llevó del territorio, en complicidad con el poder político. Entendemos que también atrás de esto esta Luciano Benetton, que es el terrateniente donde la Pu Lof recuperó el territorio ancestral mapuche, donde fue devuelto el cuerpo de Santiago sin vida. Entendemos nosotros que es un crimen de estado, un crimen que no será esclarecido lamentablemente, porque esto tiene un costo político alto. Desde hace bastante tiempo nosotros no hemos tenido casi relación con Sergio Maldonado pero sí sabemos que ellos están llevando adelante, a su forma, el pedido de justicia. Pero nosotros somos conscientes que Santiago acompañó la lucha del pueblo-nación mapuche, estuvo en un momento crucial en la ruta 40, pidiendo la libertad de los 9 presos que en aquel momento, el 31/7, teníamos en Bariloche, y pidiendo la libertad del lonco Facundo Jones Huala. Y Santiago era consciente de dónde estaba y estaba acompañando el proceso de recuperación territorial como lo hacen muchos compañeros y compañeras no mapuche.

BD- Vos Vanesa decís categóricamente que el cuerpo fue plantado ahí, algo que todos percibimos, que todos entendemos así, pero hay toda una maquinaria mediática que se encarga de decirnos lo contrario.

VM- Sí, esto es parte de la violencia política que ejerce el estado sobre las comunidades, sobre procesos dignos de recuperación territorial que se han dado a lo largo y a lo ancho del Wallmapu, que es todo el territorio mapuche. En este caso entendemos que, si bien el brazo ejecutor fue la gendarmería nacional argentina, las órdenes vienen de arriba, entendemos que más arriba estuvo la ministra de seguridad, y más arriba están los intereses económicos del gran capital y está Luciano Benetton.

BD- Facundo Jones Huala, actualmente todavía está en calidad de preso político, ¿cómo se encuentra él y su causa en la actualidad?

VM- Este es un momento donde otra vez está bastante en juego lo que es la lucha mapuche, la estigmatización por parte de los medios de comunicación. Entonces ha habido una nueva presentación, la tercera, para el pedido de su excarcelación -ya que tiene el tiempo cumplido con respecto a los derechos de cualquier ciudadano o ciudadana, él podría salir en libertad condicional- y se le ha negado este beneficio. Se le han otorgado otros beneficios como la reducción de su condena, pero este paso tan importante para todo preso político, no se ha dado.

No se ha dado porque entendemos esta relación de los dos estados, que ha sido un acuerdo político. Por estos tiempos se vienen dando otros procesos de recuperación territorial y se lo entiende como preso político justamente porque el estado, el gobierno, saben que debe estar preso porque de lo contrario muchas de las situaciones que se dan aquí en el Puel Mapu (parte oriental del Wallmapu, actualmente ocupado por el estado argentino) cambiarían. Muchas situaciones en cuanto a la lucha del pueblo–nación Mapuche que, a partir del año 2015 cuando se dio la recuperación tan mediática que se realizó allí en Pu Lof, se han dado varios procesos de recuperación territorial. Entonces se entiende que su libertad lamentablemente no será dada hasta que cumpla el total de su condena, que tampoco falta tanto para eso, que prevemos para mediados del 2023 ya podría estar en libertad, con condena cumplida, porque se ha ido sumando el tiempo que él estuvo preso antes, por esta misma causa, y recordemos que, en la Argentina, en el Puel Mapu, también estuvo preso y en el 2018 fue extraditado a Willi Mapu, a Chile.

BD- Esto nos hace pensar en lo desigual de la justicia, porque mientras a Facundo le hacen cumplir la totalidad de su condena, los asesinos de Santiago Maldonado, Rafa Nahuel y tantos otros permanecen impunes.

VM- Esto es un análisis que es bastante profundo en el sentido que aquí están en juego intereses del gran capital. Por un lado, el territorio ancestral mapuche usurpado por Benetton, y por otro lado, en el caso del asesinato del lamien Rafael Nahuel, la recuperación de un espacio de Parques Nacionales. Entendemos que la Constitución Argentina, a través del artículo 75, dice bien claro que los pueblos originarios tienen derecho a la restitución de sus tierras aptas y suficientes, etc., etc. Por otra parte, aparece el convenio 169 que ampara un montón de derechos de los pueblos originarios. Esto es así en los papeles, pero la realidad es otra; la realidad es la que vivimos día a día en las comunidades, es la militarización que por estos tiempos se vive, la realidad es que hay un estado que escribe por un lado y borra por el otro, de acuerdo a la conveniencia del poder económico político que tenga que defender en ese momento. Por eso es que, también en el caso de Rafael, asesinado por el estado, hasta el día de hoy no hay ninguna persona presa.

BD- ¿Cómo es el proceso de recuperación de esas tierras, que hoy están usurpadas por los Benetton, los Lewis, los Ginobili, y tantos otros?

VM- Difícil. Fue un proceso de años, un proceso de toma de conciencia durante muchos años, de caminar las comunidades, de conversar con las familias, de entender que es necesaria la reconstrucción del pueblo–nación mapuche. Eso tiene un objetivo que es muy amplio, que no hay otra forma de volver a nuestros territorios si no es recuperando ese territorio. Entonces se plantea un proyecto político, ideas políticas, para seguir adelante, lineamientos en los cuales las comunidades se organicen. En este caso es el MAP: Movimiento Autónomo Mapuche de Puel Mapu, que plasma esas ideas para que se dé la posibilidad de recuperar ese territorio ancestral que preexiste a los estados.

«… el estado debe reconocer que hubo un genocidio en estos territorios, y al haber un genocidio hubo una expropiación de tierras al pueblo-nación mapuche»

Esto debería ser más simple; esto no debería estar militarizado. En este momento en Quemquemtrew, donde está recuperándose aquí cerquita, el territorio no debería estar militarizado. ¿Por qué? Porque es un conflicto viejo, que el estado debe reconocer que hubo un genocidio en estos territorios, y al haber un genocidio hubo una expropiación de tierras al pueblo-nación mapuche. Entonces, cundo el estado reconozca, recién ahí los pueblos, en este caso el pueblo mapuche, se va a poder sentar a una mesa de negociación para poder recuperar este territorio. Para que el estado nos lo devuelva sin tener que llegar a esta confrontación.

Entendemos que las recuperaciones de tierra van a continuar, no es algo que ha quedado estancado en el tiempo. Cuando se recuperó allá en el 2015 el territorio, que fueron momentos muy difíciles, de judicialización, persecución, estigmatización, y la violencia desmedida, la militarización, los presos, los allanamientos, cómo se vivió todo ese tiempo. Nosotros éramos conscientes de que este proceso iba a avanzar. Así fue como, de ese mismo proceso, se desprendieron varias recuperaciones aquí en la Patagonia o Puel Mapu como nosotros decimos. Fueron tiempos con costos, costos políticos para nosotros, el hecho de que al Lonco lo tengan que extraditar no fue fácil, hubo que reorganizarse. Pero eso no hizo que nuestra organización /movimiento claudicara en lo que es el proceso de recuperación de tierras.

Entonces se recupera el territorio, la gente se instala a vivir allí y la idea es transformar ese territorio. Si hay pino erradicarlo, volver a sembrar, habitar allí, levantar nuestros espacios sagrados, porque nosotros somos un pueblo muy espiritual, entonces necesitamos recuperar el territorio para poder así levantar nuestros espacios sagrados, elegir nuestras autoridades, que están renaciendo, nos referimos a las Machi, a los Lonco, a las distintas autoridades que el pueblo-nación mapuche tiene, que no hay otra forma de desarrollarla que no sea el territorio. Esto también tiene que ver con proteger lo que, para el común de la gente, son los recursos naturales, llámese el agua, los árboles nativos, para nosotros son fuentes de kimün, fuentes de espiritualidad, espacios donde habitan los Ngen-Ko, son lugares que nosotros tenemos que proteger. Por eso es que cuando se recuperan territorios la gente de las comunidades, aquí por lo menos en el Puel Mapu no ha vendido su territorio, no lo ha entregado, no lo ha mal utilizado, sino todo lo contrario, se trata de recuperarlo en el sentido que las aguas no se contaminen, si hay pino sacarlos, renovar arboles nativos…

Imagen: Red de Apoyo a Comunidades en Conflicto – MAP

BD- Este territorio, a su vez, está siendo terreno de disputa por parte del estado, de las corporaciones, está siendo depredado y vemos que hay un avance atroz en este sentido. ¿Ven ustedes, como comunidad, que el extractivismo es en general un gran problema?

VM- Nosotros en nuestro lineamiento político tenemos bien claro esto. Por eso es que siempre, en todos los lugares donde se puede reivindicar decimos ¡Fuera petroleras, mineras, hidroeléctricas y toda explotación extractivista que dañe al Wallmapu! Eso lo tenemos bien claro nosotros. Sabemos que es una lucha bastante difícil, desigual, injusta y larga. Entonces tenemos que siempre ir viendo cómo movernos, cómo llevarla adelante, porque sabemos que es inmenso el sistema capitalista y no es tan fácil de combatirlo tampoco. Pero tampoco nosotros podemos permitir que sigan avanzando sobre los territorios, porque ya lo hicieron… hace mucho tiempo lo hicieron y de hecho tienen sitiadas aquí en la meseta a muchas comunidades, a quienes presionan para que vendan los territorios, buscan la forma de deshabitar las escuelas rurales para que luego la gente tenga que emigrar a las ciudades, comprar los territorios, y avanzar.

BD- Según uno puede ver desde aquí, ustedes enfrentan lo mismo que, en la llanura y en distintas partes de la Patagonia, están enfrentando otras organizaciones sociales, que es justamente la pelea contra el extractivismo ¿Hay posibilidad de coincidir con ellos y ellas en esta lucha?

VM- Sí. Aquí hay muchas asambleas ambientalistas. Está una asamblea muy grande aquí cerca que es la asamblea “No a la Mina” en Esquel, están las UAC (Unión de Asambleas de la Comunidad), que son compañeros que también están en la lucha por el agua, por el territorio. Entonces muchas de las acciones sí se pueden coordinar con ellos y se puede llegar a un punto de encuentro. Porque en realidad nosotros no pretendemos salvarnos solamente los mapuche y que el resto de la humanidad desaparezca. Es estúpido pensar, como algunos medios de comunicación hegemónicos dicen: “quieren organizar una nación dentro de una nación”, ¡no están entendiendo para nada el planteo! Entonces sí se puede trabajar bien con ellos y ellas, de hecho las marchas de los 4 (de cada mes, en Esquel contra la megamineria), que son emblemáticas también, en general muchas comunidades asistimos cuando podemos, otras asisten más, por cuestión de cercanía. Es un proceso también que se ha dado y se ha formado en realidad con toda la gente de aquí: tanto la gente mapuche como la no mapuche de distintas organizaciones. Y de hecho hace veinte años, allí en Esquel, se hizo un plebiscito donde se dijo NO a la megaminería y justamente la organización nació entre vecinos y vecinas autoconvocados de distintos sectores.

BD- En esto que tiene el poder mediático de buscar un enemigo, recordamos que hace un tiempo atrás  habían demonizado a la RAM, prácticamente la RAM era Al Qaeda y varios más ¿Qué es exactamente la RAM?

«… hay una gran demonización, porque cuando se ataca el capital, como en este caso, los medios de comunicación hegemónicos responden al empresariado, al gobierno, y son todos funcionales al poder político y económico».

VM- La RAM es la Resistencia Ancestral Mapuche. Es una organización que parte desde las comunidades mapuche, es un brazo militar del pueblo mapuche, que siempre ha existido, solamente que en este caso son de distintas comunidades las personas que integran ese brazo militar, que están preparados para realizar acciones de sabotaje, en contra del capital y sin dañar obviamente a ninguna persona común. Justamente contra el capital que está devastando el Wallmapu. La organización no está pensada en avanzar hacia pequeños productores o hacia gente común.

Obviamente que hay una gran demonización, porque cuando se ataca el capital, como en este caso, los medios de comunicación hegemónicos responden al empresariado, al gobierno, y son todos funcionales al poder político y económico. Entonces, obviamente que no van a tener neutralidad. Nosotros lo entendemos también. Entonces lamentablemente el pueblo mapuche siempre está teniendo que salir a defenderse o a aclarar. Porque como tienen el poder de llegar a la gente, eso genera noticias falsas y vuela por todos lados. Hay gente a la que sí le interesa más la profundidad y empieza a investigar, a consultar por otros lados y llega a alguna verdad, y hay gente que consume lo que el mercado le ofrece, entonces es donde se va formando una opinión.

BD- Abusando un poco de tu generosidad, te voy a preguntar por el conflicto que están viviendo las comunidades mapuche del otro lado de la cordillera, lo que sería hoy territorio chileno. ¿Cuál es la situación allí?

VM- La región ha sido militarizada. Esto lo hace el gobierno, intentando salvaguardar la cuestión de que fue denunciado Piñera con los Pandora papers y que está imputado, luego aparece un paro de camioneros  y sindicatos en las rutas de allá. Esto se suma  a las acciones de sabotaje, donde se da lucha también al capital y se lo confronta con acciones de sabotaje por parte de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM). Entonces hay un gran levantamiento allí, y de resistencia porque realmente las forestales están destrozando el Wallmapu, se están consumiendo toda el agua de las comunidades, las forestales tienen muchísimo territorio tomado; entonces hay muchísimas comunidades que están recuperando su territorio y también hay algo que el pueblo–nación mapuche, a ambos lados de la cordillera, tiene el derecho de organizarse, de defenderse, el legítimo derecho a la autodefensa. Entonces allí suele hacerse esto muy bien, con mucha organización y disciplina. Y cuando la organización mapuche empieza a avanzar, la reacción directa del capital es militarizar; porque ellos no han logrado todavía llegar a dar con una respuesta o una propuesta de diálogo seria a este conflicto, que es un conflicto que tiene razones profundas y que son históricas también. Entonces ante esto, responden como lo han hecho siempre: con represión, militares en la calle, cada tanto compran mucho armamento, porque no hay interés de parte del capital de solucionar este conflicto que bien se podría llegar a solucionar.

BD- Para terminar Vanesa, ¿en qué condiciones materiales hoy están viviendo las comunidades mapuche?

VM- Hay muchas comunidades a lo largo y a lo ancho del territorio, que tienen distintas dificultades. Por ejemplo, en la meseta uno de los grandes problemas es la falta de agua. Entonces la falta de agua hace que vos, tus animales no puedan reproducirse, la agricultura esté bastante mal, no tenés agua porque la están contaminando, la poca agua que hay el gobierno se la entrega a las mineras, entonces esa zona está bastante complicada. Aquí, de este lado de la cordillera, lo que ocurre es que no hay freno a los atropellos desde los empresarios o los terratenientes, que están en contra de la gente mapuche. Hay varias comunidades que están siendo sitiadas, en el sentido de que los terratenientes les cierran los caminos vecinales. Un ejemplo claro es la comunidad Nahuel Pan a 16 km de Esquel; otro ejemplo es, a 60 km de Esquel, el Lof Catriman, ahí hay una papay que está arriba encerrada en el campo porque le cierran los caminos vecinales y no les permiten la entrada. Ahí cerca tenemos otro Lof en Parques Nacionales, que está en una gran disputa con el estado provincial de Chubut. Y ahora tenemos Quemquemtrew, que está militarizado. Hace un mes que se recuperó ese territorio en la Cuesta del Ternero, a unos 20 km de la ruta 40, entre El Bolsón y Bariloche. Iban a tener una mesa de diálogo un lunes y el sábado le mandaron la  represión como un intento de desalojo encubierto y tuvieron 4 detenidos, dos personas que fueron llevadas a una audiencia donde ahora el cargo es usurpación. Y ahí los tienen sitiados, los tienen arriba en la montaña, la gente resistiendo, y por otra parte hay un campamento que lleva entre 20 y 25 días, donde la gente está acompañando ese proceso, porque no les permiten la entrada a llevarles alimento, abrigo. Están ahí entre tira y afloje: el gobierno mete más represión, militarización de la zona, hay muchísimos controles de la policía de la provincia, hay muchos militares por ahí dando vueltas todo el tiempo, intimidando a la gente que se acerca en solidaridad y a la gente de la comunidad. Mientras tanto el gobierno cerró todas las posibilidades de dialogo: ya les dijo que no a los habeas corpus, les dijo que no a las mesas de dialogo. Está trabado el conflicto en este tiempo, cada vez están como más encerrados lamentablemente.

El problema de esto es que las reivindicaciones territoriales van a continuar y esto no debería tener un resultado de más violencia o de más confrontación, porque en realidad hay que solucionar el problema de fondo y es que aquí en el Puel Mapu, en todo el Wallmapu es donde se realizó el genocidio, y ahí fue donde se apropiaron de nuestras tierras, de nuestra gente; se la llevaron a los museos, la dejaron en los campos, la despojaron de su territorio, les desmembraron las familias. Entonces hubo un genocidio pero así y todo, no nos pudieron exterminar. Estamos vivos, estamos aquí, luchando, nos estamos reorganizando. Nosotros como pueblo veremos cómo sigue la organización mientras tanto, porque cada vez la gente va tomando más conciencia que el único camino es este: o el capital avanza o el mapuche avanza.

BD- ¿Hay algo que quieras decir, que no te hayamos preguntado por ignorancia?

VM- Quiero agradecerles la oportunidad de llevar la palabra a lugares bastante retirados de nuestro territorio, ojala que mucha gente pueda por lo menos escuchar el mensaje y, tal vez, tomar consciencia en el sentido de intentar proteger el medioambiente, tratar de, cada uno desde su lugar, hacer un aporte  a este planeta porque es lo único que tenemos y hay que cuidarlo de alguna manera. Entonces ese aporte tiene que ser de todas y todos para poder seguir manteniéndonos vivos aquí y sobre todo para nuestro futuro, nuestros hijos, nuestros nietos. Nosotros, hay cambios que lamentablemente no los vamos a poder ver, los podemos impulsar pero no ver, pero eso no quiere decir que hay que rendirse sino todo lo contrario.

Nosotros tenemos una página donde puede ingresar la gente que esté interesada en tener más información, es una página de Facebook que es Red de Apoyo a Comunidades en Conflicto – MAP, ahí subimos todas las noticias, lo que está sucediendo a las distintas comunidades y sobre todo nuestra verdad. Así que esa sería mi palabra, Amulepe taiñ weichan, nuestra lucha continua, libertad a los presos políticos mapuches ¡Marichiweu!